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Honestidad, Claridad y Corazón (Para defender la RSC de la crisis)

Hace un tiempo, oí en una charla esgrimir un esperanzador concepto. Se hablaba de la importancia de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) o Empresarial (RSE) y la persona que ofrecía esa conferencia apuntaba que, así como el Siglo XX había sido el Siglo de la Tecnología, el siglo XXI sería el Siglo del Corazón. Perdonen que no me acuerde quién acuñó este comprometido término, pero no quiero hacerlo mío injustamente.

Con la actual crisis económica mundial ¿Dónde queda el Corazón de la Empresa? ¿Dónde queda la RSC? ¿Dónde quedará el compromiso empresarial?. Para aquellos que nunca apostaron por esta política corporativa, aquellos que sólo la consideraban una moda anglosajona que aseguraban que nunca calaría en nuestro país, aquellos que nunca la tuvieron en cuenta o si la tuvieron fue de una forma forzada, obligada por su entorno y por los grupos de interés, es el momento adecuado para certificar su defunción.

Aquellos que la usaron básicamente como un elemento propagandístico, que inflaron sus Memorias de Responsabilidad y Sostenibilidad, siendo conscientes que el mercado les pedía compromiso en este campo, tomarán el camino que les marquen, sin dar un paso adelante pero sin quedarse descolgados.

Para aquellos que han defendido la RSC como un elemento básico de la Empresa Moderna, que han abogado para que forme parte de su Cultura Corporativa, de sus elementos esenciales que la identifiquen frente a la competencia y que la destaquen ante el consumidor y el accionista, este es el momento, no sólo de salvarla, sino de afianzarla.

Aquí he recogido algunas declaraciones que apuntan en este sentido:

La actual crisis financiera devolverá el sentido social a las empresas y traerá consigo una mayor demanda de transparencia por parte de la ciudadanía. Ramón Jáuregui, Director de la Comisión Promotora del Consejo Estatal de RSE.

La RSC auténtica es la que superará los tiempos difíciles. Antonio Ballabriga, director de Responsabilidad y Reputación Corporativa del BBVA.

Una crisis puede ayudar a diferenciar a los que creen en la RSC de los que siguen una moda. Marcos González, director de Media Responsable.

En medio de la crisis, las empresas están aprendiendo a producir y a consumir de otra manera, con valores que tienen que ver más con la responsabilidad y la sostenibilidad. Maravillas Rojo, Secretaria General de Empleo e Inmigración.

La RSC tiene un origen ético, un aspecto estético, pero sobre todo una función práctica, ya que se puede traducir en ventajas competitivas. En tiempos de crisis sólo sobreviven las empresas que tienen una mayor capacidad de adaptación, que son las empresas que tienen un enfoque de responsabilidad corporativa. Francisco Román, Consejero Delegado de Vodafone España.

Las voces más optimistas, pero no exentas de razón, piensan que la RSC será uno de los elementos esenciales de la nueva empresa ya que a las corporaciones post-crisis, se les pedirá mayor transparencia, compromiso social, ética en los negocios y responsabilidad.

Pero ¿Cuáles son los elementos necesarios que debe tener la nueva RSC? Creo que hay que hacer hincapié en cuatro necesidades básicas:

1) Sensibilización de la Opinión Pública. Es necesario dotar de una mayor sensibilidad e interés a la ciudadanía sobre estos temas, fomentar su conocimiento. El consumidor debe saber que una empresa que desarrolla una buena política de RSC es una empresa comprometida con la sociedad, beneficia a la comunidad en su conjunto y, por tanto, a él como miembro de ésta.

2) Comunicar Mejor y Más. La comunicación es esencial, las empresas deben comunicar la RSC mejor y más. No digo más y mejor, que es lo habitual, porque antes que cantidad hay que comunicar con calidad. Cualquier cosa no es comunicable y no es profesional dar un tamiz de RSC a aquello que nos lo es.

3) Definir y Unificar Criterios. Es necesario clarificar e unificar definiciones y conceptos de una vez por todas. Distinguir lo que es RSC/RSE de Marketing Social/Con Causa, Acción Social o Patrocinio Social. Aclarar que la RSC/RSE va más allá que cumplir con la legalidad, ya sea medioambiental, laboral o fiscal -eso se presupone como el valor en la mili-. La RSC/RSE es un valor sostenible de la empresa que aplica independientemente y voluntariamente, atendiendo a todos su stakehoders.

4) Compromiso Personal. En necesario, por último que este compromiso parta de la persona y que la RSC/RSE sea la suma de responsabilidades individuales que se articulan de una forma concreta y con sus características especiales según la empresa, organización o entidad en la que se desarrolle su labor profesional.

Con Claridad, Honestidad y Corazón salvaremos a la RSC de la crisis que nos sacude y la haremos más fuerte.

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